7ª
CARTA
Querido Pablo:
Sigo fastidiada por el drenaje de marras.
Hoy me han dicho en el
hospital que aún no podían quitármelo y me han puesto otro, más pequeño pero
igual de incordiante; he vuelto a casa de un humor de perros y que no me ha
mejorado nada después de oír los comentarios telefónicos de mi hermanita la
oportuna (" ¡¿ Pero todavía lo llevas?! Pues a mi me lo quitaron al cabo
de cinco o seis días y Laura salió del hospital sin nada. Qué raro que sigas
expulsando tanto líquido...")
Ya se que no tiene importancia
, pero me fastidia. encima, al cambiarme de ropa he comprobado una cosa,
bastante extraña pero que no creo que tenga ningún significado especial: la
axila operada no me suda ni desprende el más mínimo olor y la otra sí. bueno,
no, de olores nada porque me lavo a diario y concienzudamente, pero ya se
entiende lo que quiero decir. Lo he notado esta mañana con toda claridad porque
venía de la calle empapada en sudor, hace una temperatura absurda para esta
época del año: diecisiete grados , y yo con abrigo.
Me alegro mucho de que te interesen mis cartas. A veces
pienso que me lo dices para animarme y para que me distraiga escribiéndolas,
pero otras veces me siento optimista y creo que mis noticias te resultan
entretenidas de verdad; intento no ponerme pesada ni melodramática, al
contrario, procuro incluir alguna anécdota divertida como ésta que te voy a
contar hoy y que tuvo su puntillo:
Cuando fui hacerme la biopsia me entregaron una autorización
que tenía que firmar, pero no me dieron bolígrafo y me hicieron pasar a la
consulta antes de que pudiera pedirlo, así que me dirigí muy educadamente al
médico y a los dos enfermeras que estaban allí:
- Buenos días. No he firmado la autorización...Me cortaron la
palabra, ofendidísimos los tres:
- ¡Señora, es una imprudencia enorme lo que usted va a hacer!
¡ Hay que detectar los tumores malignos lo antes posible por su seguridad! ¡El
tiempo corre en su contra y no debe usted arriesgarse por motivos estéticos o
por miedo a una intervención quirúrgica! Etc, etc, etc...
Cuando por fin me dejaron meter baza conseguí terminar la
frase:
- ...porque no me han dado bolígrafo y yo no llevo ninguno.
Sin comentarios. A continuación me quité la ropa ( no sabes
la de veces que me he puesto en pelotas últimamente, qué harta estoy), me
pusieron anestesia local, miré hacia otro lado por si me daba terror lo que
hacía y de pronto oí un "¡clack!" escalofriante y luego otros dos aún
más fuertes. No pude contenerme y solté:
-¡ Que barbaridad! Me parece estar oyendo al tapicero que me
cambió la tela del sofá, hacía el mismo ruido al poner las grapas.
Hubo un instante de silencio y luego una de las enfermeras
comentó:
- Pues sí, es el sonido de una grapadora grande, tiene usted
razón.
Entonces el médico ( un "chico" de nuestra edad
aproximadamente) dijo con mucha sorna:
- Vaya, pues de ahora en adelante les diremos a las pacientes
que se tumben en la camilla para que les grapemos las mamas, a ver que cara nos
ponen...
Acabamos riéndonos todos, pero yo salí de allí un poco
amoscada por unas palabras del médico que no me sonaron nada bien: oí que le
decía a una enfermera que tengo adenopatías en la axila izquierda, la del
tumor. Así que al llegar a casa busqué en el Larousse y encontré esta
definición tan sospechosa: "Afección de los ganglios linfáticos,
cualquiera que sea su naturaleza."
O sea, que además de la mama resultaba que tenía afectados los ganglios
de la axila. No entiendo nada de medicina, pero me pareció un comentario muy
alarmante y no me gustó nada.
Acabó aquí, voy hacer mis ejercicios gimnásticos para el
brazo. En el hospital me dieron un folleto que se llama "El linfedema,
recomendaciones y ejercicios para su prevención," así que yo prevengo y
procuro hacer todos los días, los ejercicios del librito. Son suaves y no e
suponen un gran esfuerzo, pero sobre todo me dan moral porque me parece que me
cuido mucho y me siento satisfecha de mi fuerza de voluntad; cuando llames
acuérdate de felicitarme por ser tan buena enferma.
Besos para ti
Nekane
P.D. - No sé si sabes lo que
es eso del linfedema. Pues consiste en una hinchazón bastante gorda del brazo
debido al vaciamiento de los ganglios de la axila; les sucede a muchas mujeres
operadas de cáncer de mama, es otra consecuencia de esta simpática enfermedad.
En fin, hasta pronto; un gran abrazo, como siempre.
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